25 de noviembre de 2008

Bella que tienes mi alma

Portada de L'Orchesographie (Cortesía de Wikimedia)
En nuestra primera entrada queremos tratar el asunto de la famosa pavana "Bella que tienes mi alma".
En nuestro medio, esta pavana fue ejecutada originalmente, si la memoria no nos falla, por el Coro Sinfónico hace ya varias décadas, con base en una cierta partitura que no contaba con mayor información. Utilizando la misma partitura, luego fue ejecutada por distintos coros nacionales, e incluso, reeditada recientemente, sin que se sepa tampoco quién es o fue responsable de la reedición.
El hecho es que tiene dos puntos importantes a observarle: Uno referido a su autoría y época y el otro a su tejido musical.

La autoría

Las partituras que circulan en nuestro medio, salvo una, indican que es de... "autor anónimo." Sin embargo, está más que documentado que el autor es el famoso compositor (y lo que hoy llamaríamos "coreógrafo") del siglo XVI, Jean Tabourot (1519-1595), y publicada bajo el seudónimo (acrónimo) de Thoinot Arbeau, en su célebre "L'Orchesographie" en 1588, bajo el título "Belle qui tiens ma vie". (Vid. fácilmente un artículo en Wikipedia. )
Incluso un respetable coro nacional ofrece la partitura en archivo tipo "pdf" y en ella no sólo se observa el famoso "anónimo" sino que la ubica en el siglo XIII, cuando resulta evidente que la armonización no puede corresponder a la baja Edad Media.

El tejido musical

La partitura común y corriente (esa que se objeta en esta entrada) contiene varios errores sobre todo en las líneas del cantus y del contra, algunas que incluso producen una distorsión armónica de los acordes originalmente usados, y que por lo tanto, comunican un mensaje musical distinto de aquel que el compositor pretendió y comunicó a sus contemporáneos, perdiéndose el sabor y colorido propio de las armonías provenientes del uso de los hexacordios típicos de la teoría musical de la época.
Y el problema no sólo se contrae a la sustitución de notas, sino que incluye enarmonías (ej.: mi# en lugar de fa natural, cuando la tonalidad no lo exige) que no sólo es un error en la notación actual, sino inaudito en la música renacentista.
En fin, como se puede ver, aprovecharemos estos espacios para comentar distintos tópicos musicales, así como las actividades del coro; según se vaya teniendo material y se considere de interés.
Pues bien, como ya le dimos la bienvenida y la información básica sobre nosotros, así como publicamos la primera entrada, sólo nos resta hacer votos por el buen desarrollo de este blog, al cual iremos agregando otros autores.

Oscar Luis Santos.

4 comentarios:

  1. Un saludo, Marcelo. Cuenta con que visitaremos tus blogs y disfrutaremos de las fotos.

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  2. Muito obrigado, Azoreano Náufrago, pero no alcanzo a entender qué quieres decirnos con tan breve expresión.

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  3. Bueno, y la cosa es peor de lo que parece. Me encontré en Youtube un coro venezolano que la cantaba atribuida a... Juan del Encina!
    Un coro, por amateur o vocacional que sea, tiene el deber de instruir a su público (además de deleitarlo) y elevar su nivel cultural; o por lo menos, tener el cuidado de no inducirlo a error.

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